¿Eres entrenador o solo repites ejercicios?

Jorge Cárdenas lanza una invitación (no una crítica) a todos los entrenadores que sienten que repiten más de lo que evolucionan. Reflexión con intención.

¿Tú qué “caraho” haces?

Atento.

Hoy sale el gran Cristo de Mena y la Virgen de la Esperanza en Málaga.
 O los legionarios para los menos beatos.

Para Málaga es un gran día, seas muy religioso o no…
 Te animo a venir, Málaga se viste preciosa.

Si no eres capillita, es una buena excusa para venir a entrenar con nosotros,
 mientras a tu familia se lo vendes como experiencia.

2x1.
 O 1x2.
 Tú decides.

(Abajo te dejo el enlace de algo nuevo que por fin anuncio.
 Sí, sois los primeros en entrar ahí.)

Si eres de los curiosos, scroll down y “bichea”.
 Si tienes paciencia (bendito don), termina de leer y luego te pasas.

Esto no es una crítica

Es una invitación.
 Una pausa.
 Un espejo.

Llevo años viendo lo mismo.

Entrenadores con talento.
 Te falta talento… pues espero que te sobren las ganas.
 Ganas de mejorar, de aprender, de contagiar.

Con experiencia.
 Fundamental: acierto y error. No hay más.

Con buena técnica.
 Y si no la tienes, preocúpate en tenerla.

Con pizarra llena.
 Esa parte nos sobra a todos.

Pero sin evolución

Porque no se trata de cuántos ejercicios tienes.
 Se trata de por qué haces cada cosa que haces.

He visto sesiones bien montadas,
 pero sin alma.
 Sin feedback real.
 Sin intención.

Solo repeticiones.
 De ejercicios.
 Y de errores.

¿Te haces preguntas?

A veces no es que no sepas más.
 Es que llevas tanto tiempo haciendo lo mismo,
 que has dejado de preguntarte si hay otra manera.

Y en cuanto dejas de hacerte preguntas,
 dejas de mejorar como entrenador.

Te propongo un ejercicio

Pregúntales a tus alumnos, a tus hijos, a ti mismo:

– ¿Entrenas o repites?
 – ¿Ambas?
 – ¿Ninguna?

Si no responden…
 Igual te sueltan un:

“Y yo qué sé pa’...”

Hacer > Pensar

Tranquilo.

Estoy cerca de por fin HACER algo que llevaba muchos años PENSANDO.

(No me gustan las mayúsculas. Las odio.
 Pero esta vez se quedan.)

He sido siempre de pensar. Mucho.
 Lo llamé creatividad. Me engañaba.
 Luego falta de concentración. Empecé a acertar.
 Ahora lo llamo falta de atención. ATENCIÓN.

Porque de foco no es.
 Tengo claro lo que quiero y dónde voy a estar.

Y tú, que has leído hasta aquí,
 lo vas a ver.
 Incluso lo vas a caminar conmigo. Lo sé.

¿Te has visto reflejado?

Entonces lo que comparto en mi newsletter te va a encantar.
 Es igual que esto, pero más crudo, más directo, más yo.

Cursos para entrenadores, entrenamientos intensivos para jugadores y mentorías.