El decálogo del buen entrenador (versión real, no de PowerPoint)
Jorge Cárdenas resume en 10 puntos lo que realmente marca la diferencia entre un entrenador cualquiera y uno que deja huella. Presencia, criterio, y valores.
El decálogo del buen entrenador
Coach.
Lee.
¿Cuántos checks vas a conseguir?
Si estás aquí, seguro que cumples al menos 3.
(Quizá más.)
Vamos al grano.
Es sábado. Y te quiero dejar tranquilo…
o inquieto con intención.
Hay entrenadores que lanzan bolas.
Y hay entrenadores que lanzan mensajes.
A veces sin decir nada.
Solo con cómo están.
Con cómo miran.
Con cómo escuchan.
Este decálogo no está en los manuales.
No se enseña en másteres.
No lo ves en los reels.
Sale de pista.
De más de 20 años viendo qué funciona.
Y qué no.
🔟 Decálogo del buen entrenador
(Edición real. No de PowerPoint.)
- Tiene presencia.
No solo física. También actitud.
No entrena en chanclas ni con desgana. - No improvisa.
Puede adaptar. Pero no improvisa.
Tiene una estructura clara. Un objetivo. - No entrena para él.
Da lo que el alumno necesita.
No lo que él quiere enseñar. - Observa antes de corregir.
Y cuando corrige, conecta.
No impone. No grita. Convence. - No permite bolas sueltas por la pista.
Cuida el espacio. Cuida a sus jugadores.
El desorden también entrena… mal. - No habla de sus problemas.
Está para escuchar. Para crear desconexión.
No para descargar su mochila en el alumno. - Llega antes que nadie.
Y se va el último.
Porque lo que pasa antes y después… también importa. - No saca el teléfono.
Ni lo lleva encima.
Si tú estás distraído… ¿cómo le exiges atención a otro? - Maneja la comunicación tan bien como las pelotas.
Sabe cuándo callar. Cuándo animar. Cuándo apretar.
Y cada frase tiene una intención. - Enseña pádel. Pero transmite valores.
Humildad. Profesionalidad. Pasión.
Lo técnico suma. Los valores multiplican.
Y si este decálogo te ha tocado,
lo que viene el 15 de junio es para ti.
Seguimos.
— Jorge

Jorge Cárdenas
Padel Pro Coach.
Entrenar te mejora. El propósito y la mentalidad te transforman.