Lo más difícil de enseñar no está en la pista

Jorge Cárdenas reflexiona sobre lo que realmente diferencia a un jugador competitivo. Y no tiene que ver con la técnica, ni con las bolas.

Lo más difícil de enseñar no está en la pista

Aprende.

Te puedes saber todos los ejercicios del mundo.
 Puedes tener una pizarra brillante,
 una metodología “propia”,
 y hasta una marca registrada.

Pero hay algo que no se enseña con conos, ni con targets, ni con circuitos.
 Ni con tablas de madera.

Lo más difícil de enseñar… no está en la pista.

Está en la esencia de uno mismo.
 En la cabeza.
 En cómo reaccionas cuando todo se complica.
 Cuando pierdes el control.
 Cuando el partido no va como esperabas.

He visto jugadores con una técnica impecable,
 que desaparecen cuando el marcador se pone 3-5.
 O que cuando pierden el primer set… se acabó el match.

Y otros con carencias claras,
 que en los momentos calientes se agrandan.

Eso no te lo da un ejercicio.
 Eso te lo da el carácter entrenado.

Y sí, el carácter también se entrena.

¿Cómo?
Buah… qué buena pregunta.

Estoy pensando dónde poner todas esas herramientas que hemos ido desarrollando.

Pero de momento… lo dejo en el aire.

A lo que iba:

El carácter se entrena cuando no te sale y lo vuelves a intentar.
 Cuando el entrenador te exige.
 Cuando no te escapas.
 Cuando no pones excusas.

Hay muchos que vienen a “hacer pádel”.
 Pero pocos que vienen a entrenarse de verdad.
A mejorar dentro, no solo fuera.
A aguantar el tirón.

Aquí cada vez el nivel es menor.
 No sé por qué.
 O sí lo sé.
 Y creo que tú también lo sabes.

A rendir cuando no hay motivación.

Buah, la motivación…
 palabra clave en las nuevas tendencias.

Daría para hablar horas sobre esto.
 Pero no es el día.

Hoy no estoy motivado para eso ;-p

Pero sí para recordarte esto:

Ganar un partido puede pasar por mil razones.
 Pero competir cada vez mejor…
 eso se construye desde otro lugar.

Desde uno más incómodo.
 Pero mucho más real.

Seguimos.

— Jorge